LA PINTURA DEL CINQUECENTO
Características de la pintura:
Mayor idealismo y subjetivismo
Se abandona lo anecdótico. El tema central se unifica. Los marcos
arquitectónicos casi desaparecen.
Preocupación por la composición: sencillas y geométricas
Logro de la perspectiva y la tridimensionalidad. Adquiere una profundidad más natural: perspectiva aérea.
Estudio del juego de luz y sombra.
Dominio Absoluto del dibujo, del movimiento, del color.
Rafael Sanzio
Los desposorios de la Virgen Óleo sobre tabla. Pinacoteca de Breda. Milán
La Escuela de Atenas
Estancia de la Signatura
Heráclito
�Euclides
Pitágoras
Autorretrato
Baltasar de Castiglione
El papa León X y dos cardenales. Óleo sobre lienzo
El Cardenal. Óleo sobre tabla
La Fornarina o retrato de una joven
La Virgen del Jilguero�
La Madonna del Gran Duque. Óleo sobre tabla
La Transfiguración Temple y óleo sobre madera. Museos Vaticanos
La parte superior de la pintura muestra la transfiguración de JesucristoLa parte superior de la pintura muestra la transfiguración de Jesucristo en el monte TaborLa parte superior de la pintura muestra la transfiguración de Jesucristo en el monte Tabor, con CristoLa parte superior de la pintura muestra la transfiguración de Jesucristo en el monte Tabor, con Cristo transfigurado flotando en frente de nubes suavemente iluminadas, perdiendo la materialidad para transformarse en Espíritu SantoLa parte superior de la pintura muestra la transfiguración de Jesucristo en el monte Tabor, con Cristo transfigurado flotando en frente de nubes suavemente iluminadas, perdiendo la materialidad para transformarse en Espíritu Santo entre los profetasLa parte superior de la pintura muestra la transfiguración de Jesucristo en el monte Tabor, con Cristo transfigurado flotando en frente de nubes suavemente iluminadas, perdiendo la materialidad para transformarse en Espíritu Santo entre los profetas MoisésLa parte superior de la pintura muestra la transfiguración de Jesucristo en el monte Tabor, con Cristo transfigurado flotando en frente de nubes suavemente iluminadas, perdiendo la materialidad para transformarse en Espíritu Santo entre los profetas Moisés y Elíascon quienes está conversando, según el relato del evangelista Mateo. Debajo de él hay tres discípulos, en tierra, asustados.
Las Tres Gracias. Óleo sobre tabla. Museo Condé Chantilly. Francia
El sueño del caballero
El Triunfo de Galatea Fresco Villa Farnesilla. roma
La bella nereida fue pretendida por Polifemo pero ella prefirió el amor del pastor Acis que fue aplastado por el gigante bajo el peso de una roca.
Galatea ha sido representada por Sanzio siguiendo a Poliziano escapando, montada en una concha tirada por delfines, de las flechas que lanzan los amorcillos. La nereida está rodeada de ninfas y tritones que no pueden escapar de los dardos del amor y se contagian de la sensualidad que envuelve al conjunto.
La composición está presidida por el dinamismo del momento, creando Rafael un espectacular movimiento hacia el exterior del que se contagian todos los personajes, en variados escorzos.
Santa Catalina de Alejandría
Puttis
Madonna Sixtina Virgen acompañada de San Sixto y Sta. Bárbara. cuadro realizado para el altar mayor de San Sixto en Piazenta,
Madonna Sixtina Virgen acompañada de San Sixto y Sta. Bárbara. cuadro realizado para el altar mayor de San Sixto en Piazenta,
Leonardo
Da Vinci
1452-1519
El hombre de Vitrubio, canon del cuerpo humano
La adoración de los magos
San Jerónimo.- Cuadro inacabado. Museos Vaticanos
La Virgen de las Rocas. Óleo sobre lienzo- Museo del Louvre
Óleo sobre tabla. National Gallery Londres
Leonardo eligió pintar un momento apócrifo de la infancia de Cristo, cuando Juan el Bautista niño (San Juanito), huérfano, refugiado dentro de una gruta y protegido por un ángel, encuentra a la Sagrada Familia en su huida a Egipto.�De acuerdo con la interpretación tradicional de las pinturas, representan a la Virgen María en el centro, empujando a Juan hacia Jesús, que está sentado con el ángel Uriel. Jesús está bendiciendo a Juan, que extiende su mano en un gesto de oración.
La última cena �(fresco.- Refertorio del Convento de Santa María de la Gracia.- Milán).
No es un fresco tradicional, sino un mural ejecutado al temple y óleo sobre dos capas de preparación de yeso extendidas sobre enlucido.
Desgraciadamente, el empleo experimental del óleo sobre yeso seco provocó problemas técnicos que condujeron a su rápido deterioro hacia el año 1500 lo cual provocó numerosas restauraciones en la magnífica obra
Retrato de un músico.- óleo sobre tabla..- Milán
La Dama del Armiño.- (Óleo sobre tabla. Cracovia-Polonia)
Ginebra de Benci.- temple y óleo sobre tabla. Galeria Nacional de Arte. Washington
La Belle Ferronière.- Óleo sobre tabla. Museo del Louvre.
Fue una de las amantes del rey Francisco I de Francia. Era una burguesa de París, y recibiría su nombre de la profesión de su marido,ferronnier (ferretero, persona que comercia con hierro), o simplemente del nombre de su marido, llamado Ferron. Este hombre fingió tolerar la conducta de su mujer, pero secretamente ideó una forma odiosa de deshacerse de ella y su amante real, contrayendo la sífilis. Ella murió pronto y Francisco I no se curó jamás. �Esta mujer dio su nombre (ferronière) a una joya que consistía en una cinta o cadena que rodea la cabeza, inmovilizando el cabello, y que se cierra sobre la frente con un camafeo o una piedra preciosa. Este adorno se puso de moda entre las mujeres de Francia e Italia delSiglo XVI, usándose para ocultar lesiones sifilíticas.
La dama de esta obra de Da Vinci usa esa joya, lo cual dio lugar a un error de catalogación. En realidad, se ignora quién es la retratada.
La Gioconda.- Óleo sobre tabla.�Múseo del Louvre�
LEDA Y EL CISNE.- Temple sobre tabla.
Representa a Leda, reina de Esparta y Zeus, metamorfoseado en cisne , a los pies de Leda se encuentran los cascarones que ella ha puesto y de los que salen Helena , Clitemnestra y los dioscuros gemelos Cástor y Pólux.
Hoy se asume que es una copia y no precisamente del original, sino una recreación a partir del cartón realizada por un discípulo leonardesco.
Cabeza de Medusa
La Virgen, el niño y Santa Ana.- Óleo sobre tabla.- Museo del Louvre.
Es la tercera de las versiones que hiciera tratando el mismo tema
La obra aparece inacabada, pues, como en muchas de sus obras, Leonardo trabajaría en la pintura durante largo tiempo antes de entregarla, siendo un buen ejemplo de la continua búsqueda del genio renacentista en la composición de las figuras, en la aplicación de la técnica del sfumato y en la maduración del significado de la escena, de la que se conservan abundantes dibujos preparatorios en el mismo Museo del Louvre, logrando finalmente innovadores modelos y formas de sombreado que definen su genialidad y que serían fuente de inspiración para numerosos artistas de la siguiente generación.
San Juan Bautista.- Óleo sobre tabla. Múseo del Louvre
Fue una de las últimas pinturas del autor y, sin duda, una de las más debatidas. Hay mucha polémica sobre el significado de la mano del santo apuntando hacia arriba, y su sonrisa enigmática ha provocado discusiones semejantes a las de la Mona Lisa.
Leonardo
Madonnas
Virgen del Clavel. Óleo sobre tabla. Munich
Virgen de la Rueca o Virgen del huso.- Óleo sobre lienzo. Colección privada Nueva York
Madonna Litta.- Temple sobre tela. M. Hermitage
Es una pintura atribuida por muchos especialistas a Leonardo. La extraña postura del Niño, sin embargo, ha llevado a algunos autores a atribuir partes de la pintura a alguno de sus alumnos
Madonna Benois.- Óleo sobre tabla. M. Hermitage
La pintura representa a María y a su hijo en un juego de miradas que resulta muy natural y que no puede encontrarse en ninguna pintura italiana de la época. En particular resultaban novedosos, la expresión de la Virgen y su rostro en forma de triángulo invertido; posteriormente, Leonardo perfeccionará el modelo en “La Virgen de las Rocas”. Es una madre con su hijo en momentos privados, reflejando una preciosa emoción entre ellos, a través de las miradas y los suaves ademanes de las manos. Esta era la intención del autor, que pareciesen naturales
Hallada una posible obra inacabada de Leonardo da Vinci�
'La batalla de Anghiari', en la copia que hizo Peter Paul Rubens en 1603.
Uno de los elementos determinantes que hace pensar a los historiadores que se trata realmente de una pieza de Da Vinci es que la pintura negra utilizada es la misma que empleó el artista para pintar La Gioconda.
La pista de La batalla de Anghiari se perdió hacia finales del siglo XVI pero la obra se hizo famosa por artistas como Peter Paul Rubens que se inspiraron en ella e incluso la reprodujeron. Las autoridades culturales de Florencia están convencidas de que Vasari pintó en 1563 su Batalla de Marciano encima del fresco de Da VInci.
Esta investigación ha despertado una enorme controversia en Italia, donde un centenar de historiadores han firmado un manifiesto en el que denuncian que se trata de una operación publicitaria "a lo Dan Brown", el autor del best-seller El código Da Vinci. Los expertos han criticado, además, que las microsondas utilizadas han dañado el freso de Vasari.
"Este hallazgo es estimulante, más si tenemos en cuenta que estamos en una fase preliminar de la investigación y que queda mucho trabajo para resolver el misterio. Pero las pruebas nos sugieren que vamos por el buen camino", ha explicado en rueda de prensa Maurizio Seracini, profesor de Historia del Arte en la Universidad de San Diego (California) e impulsor de la investigación.
La otra Gioconda
Esta copia fue pintada en el taller de Leonardo da Vinci El cuadro comparado con el original presenta algunas pequeñas diferencias pero lo más interesante, según Falomir, demuestra que el cuadro, "con absoluta certeza", está hecho en el entorno de Leonardo da Vinci o en el propio del taller del pintor.
Miguel Ángel
Sagrada Familia�Tondo Doni Óleo y temple sobre tabla. Galería Uffizi.Florencia
Capilla Sixtina
La Sibila de Delfos
Isaías
Daniel
Zacarías
Ezequiel
Isaías
Sibila libanesa
La batalla de Cascina
Leda y el cisne.- Copia del siglo XVI de un cuadro desaparecido de Miguel Angel