A continuación se resume el documento inicialmente suscrito por más de 160 líderes de la lucha por los derechos humanos y destacados opositores cubanos y que sigue sumando importantes apoyos. Es una iniciativa cívica independiente que utiliza plataformas de la organización sin fines de lucro Archivo Cuba para poder facilitarla. CUBA LIBRE: Compromiso de transición a la democracia Nosotros, cubanos que en la actualidad residimos en el territorio nacional o hemos sido forzados a abandonar nuestro país, reivindicamos el libre ejercicio de todos nuestros derechos y exigimos un cambio pacífico hacia la democracia como única solución viable a la crisis que afecta a nuestro país. Queremos una Cuba libre, independiente y democrática cuya soberanía resida plenamente en su pueblo.
Llamamos:
1. Al actual régimen, a que desmantele los órganos represivos y viabilice una transición pacífica y ordenada a la democracia.
2. A los jefes de las fuerzas armadas y de seguridad a cesar su colaboración y respaldo al Partido Comunista y sus órganos de poder.
3. A los funcionarios y empleados públicos y de toda entidad de gobierno y Estado, a que salvaguarden los documentos y archivos oficiales.
4. A todos los cubanos, a la resistencia, la desobediencia civil y la no cooperación hasta lograr el fin de la dictadura, así como a un debate nacional cívico, plural e inclusivo sobre cómo efectuar un proceso efectivo de transición a la democracia.
5. A la comunidad internacional, a que exija que el régimen deponga el poder y sancione a sus dirigentes si se niegan; a no extender asistencia material al actual régimen y enviar la ayuda humanitaria directamente al pueblo; y a que apoye el empoderamiento de los ciudadanos cubanos y su libre acceso a las telecomunicaciones.
Para iniciar la transición propugnamos la designación de un gobierno provisional de duración limitada conformado por individuos comprometidos con una transición hacia una democracia plena y que no podrán postularse a cargos de gobierno en las primeras elecciones. Dicho gobierno usará como marco de referencia legal la Constitución de 1940 (exceptuando sus incisos excluyentes o imprácticos) y sus funciones serán:
a.) coordinar el traspaso del poder y dirigir el período de transición inicial hacia la restauración de todos los derechos fundamentales;
b.) administrar provisionalmente el país y los recursos del Estado, priorizando el orden público y los servicios esenciales;
c.) planificar elecciones generales en un período no superior a 24 meses para elegir un gobierno que entre sus tareas elabore un proyecto de Constitución a someterse a un referendo nacional.
Durante el proceso de transición se debe:
- prohibir la pena de muerte, así como todo acto de violencia o arbitrario contra todo ciudadano, bienes materiales o el orden y la paz públicos;
- abolir los órganos represivos del Estado;
- derogar toda ley, regulación o práctica que atente contra las libertades fundamentales y los derechos ciudadanos;
- mantener la estructura administrativa del Estado, cesando de sus cargos e inhabilitando temporalmente a miembros del Partido Comunista, altos funcionarios administrativos civiles, así como a los altos mandos del Ministerio de las Fuerzas Armadas, del Ministerio del Interior y de la Policía Nacional;
- referir a la Justicia, con garantías de su seguridad personal y de debido proceso jurídico, a quienes hayan cometido crímenes de lesa humanidad o graves violaciones a los derechos humanos;
- legalizar las organizaciones de la sociedad civil y las agrupaciones y partidos políticos;
- garantizar libre acceso a las comunicaciones y priorizar el desmantelamiento de los monopolios del Estado sobre la prensa, la educación y las comunicaciones;
- estimular la productividad, el abastecimiento y el acceso a los bienes y servicios esenciales con medidas urgentes que induzcan el desarrollo económico y social;
- excarcelar a todos los presos políticos;
- poner en marcha la revisión de todas las condenas;
- permitir el regreso de los cubanos en el exterior, restituyendo sus derechos;
- derogar los convenios y colaboraciones con aliados y habilitadores del actual régimen que no sirvan a los intereses de la democracia.
Durante el período transitorio se debe 1.) sancionar a quien destruya, esconda, desfalque o malverse documentos, fondos, propiedades y otros activos del Estado; 2.) adoptar una regulación de transparencia sobre la gestión del gobierno provisional; y 3.) sentar las bases de un proceso de Verdad, Justicia, Memoria y Reconciliación que coordine aspectos esenciales de la transición.