Esta vez nos unimos para descubrir hermosos tesoros cerca de Bogotá, pasaremos un día lleno de aventura, conocimiento y nuevos amigos en la Reserva Natural Paramillo, una Asociación de turismo Rural Maza- Fonté.

¿A qué lugar nos dirigimos?

Muy cerca de Bogotá se encuentra la La Reserva Natural Paramillo, ubicada en el municipio de Choachí-Cundinamarca, en inmediaciones del PNN Chingaza. Hace parte de los núcleos de conservación privada, junto con La Laja, en donde originalmente se han recuperado y mantenido corredores naturales de especies como el oso andino, quien hace uso de La Reserva por el buen estado de conservación de la misma. 

En la parte media de Paramillo, encontraremos  un espejo de agua típico de la alta montaña, de porte pequeño pero esencial para la conservación de especies amenazadas como la tingua bogotana. Esta laguna da origen a la quebrada Blanca tributaria del Río Blanco, y fuente para muchos pobladores de la región.

La Reserva Paramillo, es propiedad de una familia campesina tradicional de montaña, quienes han visto en el turismo de naturaleza una nueva oportunidad para su economía, basada en la resignificación del uso sostenible de los recursos naturales.

El itinerario de este día

Esta nueva aventura con amigos iniciará con el desplazamiento entre Bogotá y el Municipio de Choachi, desde donde emprenderemos el rumbo hacia la vereda Maza, sector Fonté, para dar inicio a la caminata por el sendero de tipo circuito hacia la Laguna de Paramillo que está rodeada por bosque altoandino y páramo, este es el hogar de biodiversidad única de la alta montaña colombiana y de paisaje campesino. 

Después de una interesante charla por parte del guía local (serán pocos minutos), retomaremos la caminata de ascenso a Paramillo, esta etapa tomará aproximadamente unas  3 horas que se recorren en dirección del PNN Chingaza y de la reserva vecina de La Laja. Al llegar a la laguna, se tomará un merecido refrigerio (tipo snack) mientras se descansa disfrutando del paisaje y de la compañía de los amigos con los que emprendimos esta enriquecedora aventura, finalmente se iniciara el regreso, etapa que también guarda sus sorpresas pues se ingresa a una cascada que hace parte de la quebrada Blanca, en donde el paisaje y el sonido de la naturaleza serán la mejor recompensa a nuestro día de caminata. Luego para cerrar esta jornada el grupo podrá disfrutar de un almuerzo que se ofrece en un restaurante tipo campesino, en el que los sabores también hacen honor a la riqueza que la naturaleza nos brinda.