El gobierno de los Austrias menores comienza desde la muerte de Felipe II en 1598 hasta el fin del reinado de Carlos II en 1700. Estos reyes verán decrecer su influencia personal en el gobierno bien por falta de talento o de voluntad renuncian a ejercer el poder y se lo entregan a validos o privados. A veces estos no tuvieron las dotes necesarias para asumir tantas responsabilidades.
La institución monárquica seguía siendo respetada y acatada por todos los sectores sociales.
Es un periodo de decadencia, en el que se intenta mantener el imperio heredado, pero España pasa a ser un país secundario en el plano europeo.
Al ser las labores de gobierno cada vez más complejas y al no destacar los Austrias por su espíritu laborioso entregan el poder a sus válidos. Los válidos suelen ser de una extracción social noble, pero no de la más alta nobleza, que se encargan de tomar las principales decisiones. Gobiernan al margen del sistema institucional de la monarquía y de los Consejos.
Estos monarcas fueron: Felipe III (1598-1621); Felipe IV (1621-1665) y Carlos II (1665-1700)
Se caracterizaron por un carácter débil, incapaz de tomar decisiones, entregados a la caza y entretenimientos, aunque hay que distinguir que Felipe IV era mas inteligente y culto que su padre y se intereso más por conocer la situación política y económica del país, igual que hay que decir que Carlos II esta enfermo, era de un carácter apocado y no ejerció el gobierno. Estos monarcas renuncian al poder para entregárselo a sus validos (ver esquema).