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ECONOMÍA EN LA EDAD

MODERNA.

La monarquía de la Edad Moderna tiene gran interés por los asuntos económicos. A la política

económica que se practicaba en la Edad Moderna, se le denomina Mercantilismo. Se basaba

en los siguientes puntos:

 El oro y la plata se consideraban fundamentales. Su atesoramiento, simbolizaba

directamente la riqueza de un país.

 El Estado debía intervenir en los asuntos económicos, para vender mucho y comprar

poco. Así se buscaba como objetivo ser autosuficientes.

Colbert, ministro de Hacienda de Luis XIV, sería el principal representante del Mercantilismo.

AGRICULTURA.

La mayor parte de la población se dedicaba a esta actividad. Los rendimientos en

general, eran escasos por el antiguo instrumental empleado y por los sistemas

productivos poco rentables que se utilizaban.

Se desconocían medios para no agotar el suelo, tan sólo se aplicaba el barbecho y la

rotación bienal o trienal. En el primer caso, se dividía el territorio en dos mitades,

cultivándose una de cereal y dejándose otra en barbecho. En el segundo caso, se

cultivaba una parte de cereal de invierno, otra de cereal de verano y otra se dejaba en

barbecho. Tanto en un caso como en otro, siempre había una parte sin utilidad agrícola

y por tanto desaprovechada.

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La Tierra estaba en manos de la nobleza y del clero, que poseían grandes propiedades,

transmitidas de generación en generación. La mayor parte de la población eran

campesinos que trabajaban las tierras de sus señores y a cambio estaban sometidos al

pago de fuertes impuestos. Todo ello, no incentivaba la mejora de los terrenos agrícolas.

Ante este panorama eran corrientes las crisis de subsistencia (malas cosechas) que

provocaban hambrunas, desnutrición incluso revueltas.

Los productos agrarios eran fundamentalmente cereales (trigo, avena, centeno,

cebada,...) aunque dependiendo del lugar geográfico nos podríamos encontrar algunos

cambios: por ejemplo en la Europa Meridional existía la cultura del olivo, la vid y los

cultivos de regadíos. Igualmente se irán introduciendo productos provenientes de

América y desconocidos hasta entonces en Europa, como la patata o el maíz.

La ganadería sería una actividad complementaria de la agricultura y también

insuficiente ya que la alimentación del ganado dependía de los rastrojos e hierbas que

crecían en los campos de barbecho.

MANUFACTURA O ARTESANÍA.

En estas actividades trabaja menos población. La mayor parte se concentra en las

ciudades con sus talleres artesanales. Estos talleres eran espacios reducidos, donde con

más fuerza manual que mecánica, un grupo

reducido de personas obtenían un número

mínimo de productos manufacturados. Estos

artesanos se organizaban dentro del taller en

diferentes estadios:

-Aprendiz no cobraba tan sólo le proporcionaba

el maestro alimento y estancia. Solían entrar

muy jóvenes en el taller para aprender el oficio.

-Oficial, iba perfeccionando su oficio y cobraba

por su trabajo. Debían de pasar una especie de

examen para montar su taller de manera

independiente.

-Maestros, eran los dueños del taller y de todo el

instrumental.

Los artesanos de los distintos oficios se

agrupaban en gremios, instituciones que

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controlaban la calidad, cantidad y precio del producto final. Con el paso del tiempo, los

gremios fueron incapaces de funcionar con la ampliación de mercados (América).Así

hubo muchos comerciantes que se encargaban de adquirir la materia prima; que

distribuía entre los artesanos para que elaboraran los productos y después recogían el

producto. Esto permitía al comerciante, tener el producto cuando había demanda, y a

algunas familias les incrementaba los ingresos.

Ya en el S.XVIII surgirían manufacturas más semejantes a las fábricas del S.XIX.

Había invertido un gran capital, trabajaba una gran cantidad de obreros, aunque todavía

la mecanización era escasa. La mayor parte de este tipo de manufacturas eran fundadas

por monarcas, aunque algunas fueron de propiedad privada.

También existía una industria rural, comprendía diversos oficios que habían sido

expulsados de la ciudad por ser molestos o perjudiciales para la salud como los

curtidores, fabricación de jabón, minas, ferrerías; y otros intentaban con ello escapar a la

reglamentación de los gremios.

COMERCIO.

En el ámbito rural había un alto nivel de autoconsumo y trueque, con lo cual la mayor

parte de la actividad comercial se concentraba en las ciudades. En los núcleos urbanos

existían mercados semanales y ferias anuales, donde se podían encontrar productos y

manufacturas más caras y exóticas.

COMERCIO INTERIOR. Se dirigía a satisfacer la demanda urbana y las clases

acomodadas de la sociedad. El comercio interior desgraciadamente se encontraba

condicionado por las dificultades de los transportes. El agua de los mares y ríos solía ser

muy utilizada.