Published using Google Docs
Libro Balones Fuera.docx
Updated automatically every 5 minutes

“Balones fuera”Diversidad culturalAndrea Lahoz

BALONES FUERA

Reconstruir los espacios desde la coeducación

Resumen

       En este libro se tratan cuatro temas fundamentales: el sexismo, la coeducación, la construcción de un proyecto educativo, y la reconstrucción de espacios escolares.

       Aunque en un principio puedan parecer temas muy diferentes y que difícilmente se puedan relacionar entre sí, en este libro se interconectan en torno al tema de la educación (y, sobre todo, de la coeducación), con el fin de crear un espacio escolar y unos contenidos educativos accesibles a todos y a todas y en el que se radiquen, en la medida de lo posible, el sexismo y las diferencias, sentimientos y sensaciones que provoca en los niños aunque no se den cuenta ni ellos, ni los educadores, ni las familias.

       En las primeras páginas, a modo de introducción, se nos informa sobre el tema del sexismo en general, en los distintos ámbitos y épocas, y se transmite una fuerte oposición y desprecio ante él y ante lo que conlleva. Pero es en el sexismo en la educación en la que se centra el texto. También nos cuentan cómo empezó el proyecto que hicieron las autoras del libro y qué consiguieron con ello.

       En el primer capítulo del libro vuelve a hablarnos, pero de manera más profunda y concreta, sobre el sexismo, cómo está inmiscuido en la escuela y tapado por comportamientos y tradiciones que creemos “normales” y que pensamos que no tienen ningún tipo de repercusión ni fondo sexista. Nos hablan también de cómo educar a los niños y a las niñas en el ámbito escolar sin detalles de género/sexo (términos que también diferencian) y de que aún existen un gran número de prescripciones de género incluso en sociedades occidentales que creemos tan avanzadas. Se hace incapié en la escuela mixta, en sus ventajas y en lo que todavía le falta para ser un modelo a seguir (a pesar de que es la mejor reconocida desde casi los principios de su existencia). Insisten en avanzar hacia la coeducación, es decir, la educación en igualdad de posibilidades. Señalan dificultades que se encuentran por el camino y la gratificación y ventajas que se encontrarán al conseguirla. Con el modelo coeducativo se proponen cuatro objetivos importantes, como son:

  1. Seguir incluyendo a las niñas en un modelo cultural y educativo valorado.
  2. Modificar los modelos cultural y educativo, así como disminuir la violencia y propiciar las relaciones interpersonales.
  3. Conseguir un mayor protagonismo de las niñas en la educación.
  4. Introducir a los niños en la nueva cultura que se propone.

Con esto quieren intentar erradicar los límites opresores que han venido definiendo los géneros desde antaño.

       En el segundo capítulo, se centran en mostrarnos estrategias mediante las cuales podamos construir un proyecto coeducativo, mediante el cual se consigan eliminar rasgos sexistas que se han encontrado en la educación. Eso sí, previamente hay que hacer que la comunidad educativa se dé cuenta de la permanencia del sexismo, que se demuestre y que se actúe para cambiarlo.

Como modo de realización del proyecto coeducativo, se debe crear un grupo de trabajo en el que todos los miembros aporten ideas, fijen objetivos, creen un buen ámbito de trabajo, observen y analicen las situaciones, y consigan realizar una serie de cambios.

       En el tercer y último capítulo se habla de cómo reconstruir espacios educativos como es el patio desde la perspectiva de la coeducación. Se explican y describen los pasos que de dan para llegar a ello, con un caso concreto en el que se incluyen opiniones tanto de niños como de profesionales docentes, y todas las observaciones que tuvieron importancia o resultaron interesantes. Finalmente se citan los resultados.

Comentario personal

       El libro me ha parecido muy interesante desde un primer momento, en parte porque es un tema que me interesa y que puedo y debo tener en cuenta en mi futura profesión como docente, y en parte porque es fácil de leer: hay expresiones cultas pero también coloquiales, una gran cantidad de ejemplos y un proyecto real que nos da una idea de cómo todo lo que se nos ha ido explicando desde un principio se puede aplicar a la realidad obteniendo unos resultados interesantes.

       La verdad es que nunca me había planteado estas cuestiones sobre las insuficiencias y fallos de la educación, sobre todo en lo que al tema del sexismo se refiere, y que es de lo que más ampliamente habla el libro. Bien es verdad que hay ciertos comportamientos que todavía puedo seguir viendo casi como algo obvio y normal, pero que realmente sí que tiene una base de sexismo. Aun así, son muy difíciles de erradicar, pero desde mi perspectiva personal como futura profesora de Educación Primaria, no pongo en duda que haré todo lo posible para conseguir una mayor igualdad y trabajar desde la coeducación.

       Me ha sorprendido mucho la idea del patio como espacio en el que se dan muchas formas de sexismo, y estoy segura de que la mayoría de la gente tampoco se suele dar cuenta de esto porque, como ya he dicho, solemos ver ciertos aspectos del ámbito educativo de manera normal, como algo cotidiano, algo que debe ser así, o que “es así y punto”. Hay una famosa frase de Simone de Beauvoir que ilustra muy bien lo que acabo de comentar, que dice “no se nace mujer, se hace”. Cuando nacemos, no estamos predeterminados para actuar de una forma u otra, sino que vamos construyendo nuestros modos de comportarnos, y con ello nuestra conducta, según lo que observamos y lo que nos enseñan. Por ejemplo, no nos damos cuenta de que hay ciertos comportamientos como que los chicos jueguen al fútbol y ocupen la mayoría del espacio, y que la mayoría de las chicas o hablen en una esquina o dando vueltas al patio, o prefieran jugar a la goma, no son innatos, sino que es lo que desde los primeros años de nuestra vida tomamos como normal, como “algo que va con nosotros/as”, como algo propio de cada género. Y que no es así. Las chicas no debemos dejarnos “comer” por los chicos, y ellos no deben sentir que son los que dominan el espacio o a los que les corresponde un mayor dominio de él. Tampoco es bueno que a una chica que le guste el deporte se le vea como a una muchacha “masculinizada”, “macho”, etc. Ni que a un niño, por cualquier razón como puede ser que no le interese hacer ejercicio durante el recreo porque lo emplee para descansar, o porque prefiera entablar una conversación, se le considere “feminizado”, o “enclenque”, o aburrido…

       Hay muchos puntos y muy interesantes a tratar sobre este texto y los temas que nos expone. Y de hecho se ponen de relieve aspectos importantes e interesantes que deberían conocer los docentes. Pero hay un único fallo que he encontrado al libro, y es que, a mi parecer, se extiende demasiado. Bien es verdad que puede que se alargue porque quiera explicarnos mejor y más detalladamente lo que se quiere conseguir y lo que quieren que entendamos, pero también hace que en determinados momentos la lectura se haga un poco pesada.

       En definitiva, me ha parecido un gran libro. No es el típico libro de estudio, ni la típica novela, pero de alguna forma “engancha”, impulsa a seguir leyendo, o al menos a mí, que puede que lo haya encontrado interesante porque estoy segura de que todo lo que he leído, lo que me ha aportado, lo que me ha enseñado, y las conclusiones que he podido extraer por mi cuenta, me ayudará en un futuro a poder ser una buena maestra y a enseñar a los alumnos no solo contenidos educativos sino unos valores y unas formas de ser y de vivir que interioricen en sus primeras etapas y desarrollen a lo largo de sus vidas.

4