Origen del árbol de Navidad
Tiene su nacimiento en Alemania.
Todo sucedió un día de Navidad de la primera mitad del siglo VIII.
San Bonifacio, un misionero británico, se encontraba predicando un sermón
para convencer a los druidas alemanes de que el roble no era sagrado.
En ese momento, un roble cayó destrozando todos los arbustos y
árboles más pequeños que encontró a su paso.
Del desastre consiguió salvarse un pequeño abeto: San Bonifacio lo consideró
un milagro y le llamó 'el árbol del Niño Dios'.
Así, en las sucesivas Navidades los cristianos celebraban la Festividad
plantando abetos y, posteriormente, esta costumbre evolucionó hasta
dar lugar a la actual decoración.
Elementos decorativos del árbol.