PROCLAMACIÓN DE LOS DECRETOS DE DIOS
A TRAVÉS DE LOS MINISTROS APOSTÓLICOS DE MISIÓN SURAMÉRICA
Del 9 de abril de 2025
Por el cual se transfieren y establecen mediante confesión y declaración de fe, los propósitos eternos de Dios provenientes de la victoria de Cristo en la cruz y se ordena un curso de acción derivado, para la sanidad y el rompimiento de cadenas de esclavitud espiritual de Colombia y las naciones hermanas representadas en la MSA.
Emitido por el Consejo Apostólico de Misión Suramérica, órgano de gobierno de
LA FEDERACIÓN DE IGLESIAS COMUNIDAD CRISTIANA DE FE, MISIÓN SURAMÉRICA, COMPUESTA POR MÁS DE 70 IGLESIAS DISTRIBUIDAS EN EL TERRITORIO COLOMBIANO Y OTRAS NACIONES DEL GLOBO
En uso de sus facultades espirituales y legales según sus finalidades, aprobadas según resolución de Personería Jurídica Especial No. 4189 del 16 de diciembre de 2009, emitida por el Ministerio del Interior y de Justicia, como parte de la Iglesia de Cristo en Colombia, y
CONSIDERANDO
1. Que somos parte integral de la Iglesia de Cristo, la cuál es su cuerpo en la tierra, comprados por su sangre preciosa derramada en la cruz. Hemos sido salvados por su sacrificio redentor, nuestros pecados han sido perdonados, y hemos sido sellados con el Espíritu Santo.
Efesios 5:30[1]: porque somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos. (De Cristo la Cabeza de la Iglesia)
2. Que el Espíritu Santo nos ha capacitado y equipado con dones y ministerios para extender la obra de Cristo en el mundo a través de la predicación del evangelio de poder.
Efesios 4:11-13: Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, 13 hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.
3. Que en forma particular en la Misión Suramérica, hemos recibido de parte del Señor Jesucristo, dones y ministerios de su ascensión para cumplir una tarea de oración por Colombia, expresada en alabanza y adoración profética con todas sus expresiones e intercesión profética y estratégica especializada, ministerios que han sido reconocidos en la iglesia en Colombia por los resultados durante casi medio siglo de existencia como Misión.
4. Que el llamado, la autoridad y el poder de Dios se le ha entregado a la Iglesia de Cristo en general, para traer su Reino a la tierra y ante la situación de Colombia, nos postramos para arrepentirnos de nuestros propios pecados, los pecados de la iglesia y de forma identificativa, los pecados de Colombia en sus generaciones históricas, para ser lavados y limpiados por la sangre de Cristo y con el poder del Espíritu Santo y la gracia de Dios, volver al camino del Señor como Nación.
2 Crónicas 7:14: si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.
5. Que nuestra lucha no es contra carne ni sangre, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. (Efesios 6:12 RV60) Que Cristo dio a sus apóstoles la autoridad sobre todos los poderes del diablo. (Lucas 10:19)
Efesios 6:12 (La palabra, Hispanoamérica): Porque no estamos luchando contra enemigos de carne y hueso, sino contra las potencias invisibles que dominan en este mundo de tinieblas, contra las fuerzas espirituales del mal habitantes de un mundo supraterreno.
Efesios 6:12 (NBV): porque nuestra lucha no es contra seres humanos, sino contra los poderes, las autoridades y los gobernantes de este mundo en tinieblas; o sea, que luchamos contra los espíritus malignos que actúan en el cielo.
Lucas 10:19 (PDT): Tengan la seguridad de que les he dado autoridad de aplastar serpientes y escorpiones y autoridad sobre todo el poder del enemigo. Nada les hará daño.
6. Que tenemos la facultad Bíblica para declarar y decretar, atar y desatar en el tiempo presente, los decretos del tribunal del Padre, de la victoria eterna de Cristo en la cruz, sobre los asuntos que pertenecen al ámbito espiritual, de acuerdo a lo que fue hecho y consumado por Cristo (Salmo 149:9; Mateo 18:18) y que tales declaraciones de los decretos de victoria de Jesucristo a través de su iglesia, tienen efecto sobre la liberación, bendición y prosperidad de la nación.
Salmo 149:6-9: Exalten a Dios con sus gargantas y espadas de dos filos en sus manos, 7 para ejecutar venganza entre las naciones y castigo entre los pueblos; 8 Para aprisionar a sus reyes con grilletes, y a sus nobles con cadenas de hierro; 9 Para ejecutar en ellos el juicio decretado; Gloria será esto para todos sus santos. Aleluya.
Mateo 18:18: De cierto les digo que todo lo que aten en la tierra, será atado en el cielo; y todo lo que desaten en la tierra, será desatado en el cielo.
Parágrafo explicativo 6:1: Atar en la fraseología judía contemporánea de Jesús significa prohibir, declarar impropio o ilegal. Desatar significa permitir, declarar lícito, de tal forma que la iglesia de Cristo a través de sus ministros apostólicos tiene autoridad para declarar y permitir o declarar y prohibir como ilícito y será así mismo, por consecuencia y reflejo en el cielo. Esto es el principio de delegación de autoridad y poder de gobierno. Nos da a entender, que los apóstoles representan la misma autoridad del cielo y Dios no los desautoriza sino que los respalda como enviados suyos. Tales declaraciones tienen el mismo poder y efecto de los decretos.
Parágrafo explicativo 6:2: Decreto es el dicho de una persona que tiene autoridad o facultades para ello. Resolver, decidir, determinar, promulgar, dictar. Tiene la autoridad porque le ha sido dada y no puede decretar nada de sí mismo, sino en representación de quien le otorgó la autoridad para representar su gobierno. Así, los apóstoles declaran los decretos eternos de Dios en Cristo según las escrituras y los establecen o decretan sobre el ámbito de gobierno que les corresponde, esto es, sobre el mundo y gobierno espiritual invisible que incide sobre el mundo y gobierno natural visible de los hombres.
7. Que la Iglesia de Cristo se rige bajo el principio de respeto a las autoridades nacionales, de acuerdo a lo establecido en Romanos 13:1-6, según el cual se indica que toda autoridad superior ha sido establecida por Dios y los que resisten acarrean condenación para sí mismos. Por esto, se entiende que el presente decreto no representa un desafío a la autoridad gubernamental nacional, que fue establecida de acuerdo a la constitución y ordenamiento político del país. Por el contrario, el presente decreto de gobierno desde el ámbito espiritual, funciona en concomitancia con la constitución y las leyes de la República de Colombia, para traer el respaldo de Dios, su palabra y sus principios eternos a todo gobierno terrenal de turno y autoridad legalmente constituida en el principio del derecho, dando cumplimiento a la constitución vigente de 1991 que en su preámbulo invoca la protección de Dios. Si la constitución como máxima autoridad de la república de Colombia invoca la protección de Dios, nosotros en representación de Dios, respondemos a esa invocación con los decretos eternos de su Palabra. De otra forma, la invocación de la protección de Dios quedaría sin respuesta expresa.
Romanos 13:1-6 (NBV): Todos deben obedecer a las autoridades del gobierno, porque Dios es quien les ha otorgado el poder. No hay ningún gobierno que Dios no haya establecido. 2 Así que los que se niegan a obedecer a las autoridades se rebelan contra lo que Dios ha ordenado, y recibirán castigo. 3 Las autoridades no están para darle miedo a la gente que hace el bien, sino a los maleantes. Así que si no deseas temerlas, pórtate bien y las autoridades hablarán bien de ti. 4 Dios ha puesto al servicio de él a las autoridades para tu beneficio. Pero si estás haciendo algo malo, claro que tienes que temerlas, porque para eso tienen armas para castigarte. Para eso las ha puesto Dios, para actuar con justicia y castigar a los malhechores. 5 Así que hay que obedecer a las autoridades para que no te castiguen y porque es un deber de conciencia. 6 Por eso mismo ustedes pagan impuestos. Las autoridades están sirviéndoles en el trabajo que Dios les ha encomendado.
Preámbulo de la Constitución Política de Colombia: El pueblo de Colombia en ejercicio de su poder soberano, representado por sus delegatarios a la Asamblea Nacional Constituyente, invocando la protección de Dios, y con el fin de fortalecer la unidad de la Nación y asegurar a sus integrantes la vida, la convivencia, el trabajo, la justicia, la igualdad, el conocimiento, la libertad y la paz, dentro de un marco jurídico, democrático y participativo que garantice un orden político, económico y social justo, y comprometido a impulsar la integración de la comunidad latinoamericana decreta, sanciona y promulga la siguiente Constitución Política de Colombia (www.colombia91.pdf)
8. Que como iglesia de Cristo en Colombia respaldamos la invocación constitucional a Dios por parte de cada gobierno y sus gobernantes. Aclaramos que la invocación a Lucifer, enemigo de Dios y de Jesucristo no forma parte del preámbulo de la constitución; tampoco, la invocación a otros espíritus de la hechicería, espíritus africanos de conjuros, espíritus territoriales de pactos y toma de sustancias alucinógenas para hacer invocaciones, todos ellos aliados infernales de Satanás que es el mismo Lucifer, si son o han sido practicados por gobernantes con fines de asegurar su éxito, pactando a la nación con poderes oscuros, son actos contrarios a la Palabra del Dios que es invocado en la constitución. Tales actos son prohibidos en la Biblia, el libro dado por Dios, porque producen esclavitud espiritual, ruina económica, ceguera y maldición sobre los pueblos gobernados.
Deuteronomio 18:9-14: Cuando entres a la tierra que Jehová tu Dios te da, no aprenderás a hacer según las abominaciones de aquellas naciones. 10 No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, 11 ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos. 12 Porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas abominaciones Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti. 13 Perfecto serás delante de Jehová tu Dios. 14 Porque estas naciones que vas a heredar, a agoreros y a adivinos oyen; más a ti no te ha permitido esto Jehová tu Dios.
Deuteronomio 28:15-20: Pero acontecerá, si no oyeres la voz de Jehová tu Dios, para procurar cumplir todos sus mandamientos y sus estatutos que yo te intimo hoy, que vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te alcanzarán. 16 Maldito serás tú en la ciudad, y maldito en el campo. 17 Maldita tu canasta, y tu artesa de amasar. 18 Maldito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, la cría de tus vacas, y los rebaños de tus ovejas. 19 Maldito serás en tu entrar, y maldito en tu salir. 20 Y Jehová enviará contra ti la maldición, quebranto y asombro en todo cuanto pusieres mano e hicieres, hasta que seas destruido, y perezcas pronto a causa de la maldad de tus obras por las cuales me habrás dejado.
9. También la tierra gime por la manifestación gloriosa de los hijos de Dios, pues se encuentra en esclavitud de maldición a causa de la vanidad, el pecado, las manchas de sangre y el abuso de ella mediante la siembra y explotación de los cultivos de coca. Los hijos de Dios manifestados tenemos la misión de contrarrestar espiritualmente el problema mundial de las drogas ilícitas, atando al hombre fuerte o potestad que la controla desde el aire y desatando el poder de Dios para desarticular cada eslabón de la cadena del narcotráfico desde el cultivo hasta el consumo, el cual ha afectado por cuatro décadas al pueblo colombiano.
Romanos 8:19-22: Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. 20 Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; 21 porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios. 22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora…23. Y los cielos que están sobre tu cabeza serán de bronce, y la tierra que está debajo de ti, de hierro. 24 Dará Jehová por lluvia a tu tierra polvo y ceniza; de los cielos descenderán sobre ti hasta que perezcas.
Efesios 2:2: en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia.
10. Que según el apóstol Pablo, “la iglesia del Dios viviente es columna y baluarte de la verdad”, (1 de Timoteo 3:15), es decir, que la iglesia está destinada a ser el faro espiritual de una nación, y por lo tanto, cuando la iglesia atenúa la luz de la Verdad de Dios o la apaga por completo, la nación comienza a operar y funcionar en oscuridad espiritual. Que en virtud de lo anterior, reconocemos y nos arrepentimos como iglesia de Colombia de nuestros pecados, nuestras omisiones y nuestra indiferencia y divisiones por pasiones humanas, descuidando el rol de ser luz en medio de las tinieblas y trazar el camino de navegación seguro para la nación. Que como iglesia de Colombia nos comprometemos a mantenernos en posición de vigilia, guardia y atalaya, orando, evangelizando, discipulando, adorando e intercediendo, para no permitir que la luz del faro mengue o se apague.
1 Timoteo 3:15: para que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad.
Colosenses 2:15: y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz.
Apocalipsis 1:6: y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.
Apocalipsis 5:10: y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra.
12. Que la iglesia de Cristo es una milicia de tipo espiritual al servicio del Cordero de Dios con armas espirituales para la destrucción de fortalezas (2 Corintios 10:4). En esta acción militante, como iglesia apostólica, es nuestro deber comunicar y cumplir el juicio decretado por Dios Padre a través de la victoria de Jesucristo en la Cruz sobre todos sus enemigos, (Colosenses 2:15) atando a los reyes con grilletes y a los nobles con cadenas de hierro (referido a los principados y potestades espirituales) mediante el poder de la alabanza y la intercesión, así como lo declara el Salmo 149: 6-9.
Salmo 149:6-9: Exalten a Dios con sus gargantas y espadas de dos filos en sus manos, 7 para ejecutar venganza entre las naciones y castigo entre los pueblos; 8 Para aprisionar a sus reyes con grilletes, y a sus nobles con cadenas de hierro; 9 Para ejecutar en ellos el juicio decretado; Gloria será esto para todos sus santos. Aleluya.
13. Que esa misma autoridad dada por el Padre a Cristo, autoriza a la iglesia con el poder de la Palabra de Dios en la boca de todos sus ministros, para arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y para plantar sobre naciones y sobre reinos,
Jeremías 1:9-10: Y extendió Jehová su mano y tocó mi boca, y me dijo Jehová: He aquí he puesto mis palabras en tu boca. 10 Mira que te he puesto en este día sobre naciones y sobre reinos, para arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y para plantar.
14. Que históricamente desde la fundación de nuestra nación hemos vivido ciclos de violencia constantes que con sus diferentes manifestaciones han sembrado en los colombianos dolor, impotencia, desesperanza, miedo y venganza. Todo esto ha sido normalizado y se ha hecho parte de nuestra cotidianidad. Pero este no es el plan de Dios para Colombia, por eso buscamos su dirección para enderezar nuestro camino y obedecerlo, nos comprometemos a caminar alineados con los tiempos señalados de Dios, que el Espíritu Santo marca y que la verdadera memoria histórica de nuestra nación sea fundamentada en que la sangre de Cristo, quien redimió este tiempo y que puso un hasta aquí, a “la horrible noche”.
15. Que constantes magnicidios han sido perpetrados y ejecutados en nuestra nación en ciclos de aproximadamente cuarenta años, con profundas implicaciones para la historia de Colombia, entendiéndose que cuarenta años es el tiempo según la Biblia de las generaciones, y siendo estas ejecuciones un plan de muerte de satanás y sus jerarquías posicionadas en lugares celestes, con el fin de mantener a la nación sumida en el odio, la venganza y el espíritu de Caín, (hermano matando a hermano). Esta potestad de muerte, quiere mantener el ciclo en el presente, estando a punto de cumplir el tiempo de otra generación. El magnicidio de Rafael Uribe Uribe el 15 de octubre de 1914, asesinado en el camino al congreso de la república, el magnicidio de Jorge Eliecer Gaitán el 9 de abril de 1948, hecho que cambió radicalmente la historia del país, considerado como el inicio del largo conflicto social y armado que hoy sigue causando víctimas en Colombia y el magnicidio de Luis Carlos Galán, ocurrido el 18 de agosto de 1989.
16. Que, de acuerdo a lo dispuesto en Apocalipsis 17:6, las huestes de maldad y brujería en Colombia, se han fortalecido con el derramamiento de sangre de los santos y mártires que han sido masacrados en el marco de la violencia armada, además de todas las víctimas del conflicto y narcotráfico y que “la voz de la sangre de tu hermano clama a Dios desde la tierra”. (Génesis 4:10) Las noticias seculares no lo reflejan como un hecho de trascendencia y no reportan estadísticas claras, pero en Colombia han sido perseguidos y asesinados cientos de pastores, sobre todo en las zonas rurales.
Apocalipsis 17:6: Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.
17. Que, de igual manera, se aproxima un tiempo para definir asuntos político-electorales de trascendencia nacional y nuestra asignación como ciudadanos del Reino es interceder permanente y estratégicamente para que los designios de Dios se establezcan en lo natural.
Por precepto apostólico ordenamos en la autoridad y poder de la victoria de Cristo y en mérito de lo expuesto: (Mateo 28:18)
Mateo 28:18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
PROCLAMAMOS Y DECRETAMOS CON BASE EN LA VICTORIA DE CRISTO:
Éxodo 15:16: Caiga sobre ellos temblor y espanto; A la grandeza de tu brazo enmudezcan como una piedra; Hasta que haya pasado tu pueblo, oh Jehová,
Hasta que haya pasado este pueblo que tú rescataste.
Jueces 5:31: Así perezcan todos tus enemigos, oh Jehová; Mas los que te aman, sean como el sol cuando sale en su fuerza.
1 Samuel 2:10: Delante de Jehová serán quebrantados sus adversarios y sobre ellos tronará desde los cielos; Jehová juzgará los confines de la tierra, dará poder a su Rey y exaltará el poderío de su Ungido.
Apocalipsis 15: 3-4: Y cantan el cántico de Moisés siervo de Dios, y el cántico del Cordero, diciendo: Grandes y maravillosas son tus obras, Señor Dios Todopoderoso; justos y verdaderos son tus caminos, Rey de los santos. 4 ¿Quién no te temerá, oh Señor, y glorificará tu nombre? pues solo tú eres santo; por lo cual todas las naciones vendrán y te adorarán, porque tus juicios se han manifestado.
2. Decretamos que los principados, potestades, gobernadores de tinieblas y huestes espirituales de maldad que han operado sobre Colombia y las naciones hermanas, trayendo muerte, robo, destrucción, caos e injusticia, sean atadas y retrocedan; vean su humillación y derrota ante la victoria de Cristo en la Cruz; recogemos la sangre derramada en el territorio llevándola ante el juicio redentor de la sangre de Cristo; decretamos la estrategia divina de terror, foso y red expuesta en Isaías 24:18 y que la actividad espiritual que ha estado incitando el recrudecimiento de la violencia, cese sobre los moradores de nuestra tierra y toda frecuencia de brujería, contraria a la voz poderosa de Jesucristo, sea interrumpida por la frecuencia de la intercesión, adoración y el cántico de victoria del Cordero.
Isaías 24:18: Y acontecerá que el que huyere de la voz del terror caerá en el foso; y el que saliere de en medio del foso será preso en la red; porque de lo alto se abrirán ventanas, y temblarán los cimientos de la tierra.
3. Declaramos que, en consecuencia y en virtud de lo anterior, la iglesia de la nación de Colombia y las naciones hermanas representadas en MSA, reciben y toman autoridad del Espíritu Santo para arrancar, destruir, arruinar y derribar las obras de las tinieblas, para edificar y plantar (Jeremías 1:10) al escuchar y atender lo que está siendo ordenado desde la eternidad por el Señor Jesucristo como máxima autoridad y como Comandante de los Ejércitos celestiales, de conformidad con la declaración del Himno Nacional de Colombia, según la cual “La humanidad entera, que entre cadenas gime, comprende las palabras del que murió en la Cruz”.
Jeremías 1:10: Mira que te he puesto en este día sobre naciones y sobre reinos, para arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y para plantar.
4. Decretamos que es desarraigada toda maldición por el magnicidio de líderes políticos, principalmente por la muerte de Jorge Eliecer Gaitán, hoy 9 de abril de 2025. Desactivamos todo espíritu de venganza que comenzó a operar en las generaciones por causa de su sangre derramada; declaramos el perdón de Dios por estos pecados históricos, redimimos el clamor de su sangre desde la tierra, la recogemos, la reclamamos de manos del espíritu de violencia y la entregamos a Jesús, pues en la sangre de Jesucristo nuestro Señor, está la verdadera redención. La sangre de los caudillos no volverá a ser usada para renovar los ciclos de violencia sobre Colombia, ni para perpetuar la lucha armada. “Mía es la venganza, dice el Señor”.
Romanos 12:19: No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.
Colosenses 2:15: y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz.
Apocalipsis 1:18: y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.
5. Decretamos que es desarraigada toda creencia y práctica, impuesta por los conquistadores españoles mediante la cual, justificaron los actos de violencia y sometimiento a los indígenas por el derecho dado por el Papa Alejandro VI en 1493, donde otorgaba a la corona española el derecho a apropiarse de los territorios que hoy son Colombia y a someterlos aseverando “…y a vosotros y a vuestros herederos y sucesores os hacemos señores de ellas con plena y libre y omnímoda potestad, autoridad y jurisdicción”. Contrario a esto, declaramos que el único Señor y autoridad legítima establecida en Colombia desde la jurisdicción celestial es el Señor Jesucristo, Príncipe de paz, cancelando así la maldición de robo y abuso sobre la tierra para fines ilícitos. Establecemos el orden y equidad del Reino de Dios sobre el Estado de Derecho de la nación.
Salmos 24:1: De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan.
Mateo 5:5: Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad.
6. Decretamos que son desarraigados de todo sustrato espiritual de la nación colombiana las ideas y argumentos predominantes en las guerras civiles ocurridas de 1849 a 1903 entre los partidos políticos, según los cuales era legítimo alzarse en armas e iniciar una guerra cuando se percibía una amenaza al orden y al estatus quo, o como una respuesta al incumplimiento de las reglas del juego, particularmente asociados a acusaciones de fraudes electorales, así como justificada por divergencias entre modelos de gobierno federalista o centralista. En consecuencia establecemos la reconciliación, el perdón, el amor fraterno y la unidad en Colombia y las naciones, como dice la Palabra de Dios, derribando la pared intermedia de separación.
Efesios 2:14: Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno, derribando la pared intermedia de separación,
7. Decretamos que se desarman los corazones de los colombianos y las naciones hermanas de todo deseo de venganza e intolerancia por las ideas contrarias que han gestado las luchas internas fratricidas, como dice en proverbios 6:19: “Dios aborrece y abomina las manos derramadoras de sangre inocente y la discordia entre hermanos…”. Desactivando todo espíritu de contestación, rebelión y desafío al orden legal constitucional, que ha alimentado toda forma de violencia en nuestras naciones.
8. Proclamamos que el cierre de ciclos de violencia, conlleva consigo el inicio de un cambio de era, como establecen las escrituras en Isaías 60, y que el Señor Jesucristo le dice a Colombia y las naciones hermanas: “Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti”, y en este mismo sentir, como iglesia de Cristo proclamamos que “amanecerá Jehová y será vista su gloria. Y andarán Colombia y las naciones hermanas a su luz, y los reyes al resplandor de su nacimiento”.
Isaías 60:1-2: Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti. 2 Porque he aquí que tinieblas cubrirán la tierra, y oscuridad las naciones; mas sobre ti amanecerá Jehová, y sobre ti será vista su gloria.
9. Decretamos que es desarraigado el espíritu del amor al dinero, (raíz de todos los males) y en su lugar proclamamos que la luz de Cristo ilumina mentes y corazones para que la búsqueda del bien común sea parte de nuestro derrotero como nación. Que no prosperen los intereses individuales que ciegan y pervierten. Proclamamos que la expresión del Reino de Dios en Colombia sea justicia, paz y gozo; que seamos conocidos en el mundo por los dones redentivos que Dios nos ha dado.
Éxodo 23:8: No recibirás presente; porque el presente ciega a los que ven, y pervierte las palabras de los justos.
Proverbios 17: 8: Piedra preciosa es el soborno para el que lo practica; Adondequiera que se vuelve, halla prosperidad.
1 Timoteo 6:10: porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.
10. Decretamos que se quitan las vendas y las mordazas que han inmovilizado a nuestras naciones para que éstas no se levanten conforme a los planes de Dios cuyas generaciones emergentes, teniendo como principio rector la palabra de Dios, sustituyan las antiguas formas religiosas de los hombres estableciendo un altar permanente de adoración a Dios. Proclamamos que la Iglesia en movimiento prepara camino y endereza veredas para que el Príncipe de Paz gobierne en el territorio colombiano, en las naciones hermanas y a través de la obra del Espíritu Santo lleguen a la transformación con nuevas estrategias en el ámbito económico-productivo, la educación, la ciencia y la política.
Isaías 40:3: Voz que clama en el desierto: Preparad camino a Jehová; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios.
Isaías 9:6-7: Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. 7 Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto.
11. Establecemos que desde el mundo espiritual y en consecuencia sobre el territorio natural, comienza a operar un cambio de diseño, para que sea arrancado de raíz y se seque todo cultivo que ha traído destrucción, guerra y dolor a los territorios y que sean plantadas desde los mismos diseños creativos de Dios, nuevas semillas sobre los surcos de las tierras fértiles, como el Catatumbo, para traer sobre Colombia una economía sana y lícita.
12. Decretamos que se recoge la sangre de más de 124.000 personas desaparecidas. Se limpian los ríos y territorios afectados por minería ilegal, minas antipersona y actividades ilícitas que afectan la vida de sus habitantes. Declaramos la sanidad y restauración para Colombia de sus tierras y ríos.
Jeremías 30:17: Mas yo haré venir sanidad para ti, y sanaré tus heridas, dice Jehová; porque desechada te llamaron, diciendo: Esta es Sion, de la que nadie se acuerda.
Ezequiel 36:33-35: Así ha dicho Jehová el Señor: El día que os limpie de todas vuestras iniquidades, haré también que sean habitadas las ciudades, y las ruinas serán reedificadas. 34 Y la tierra asolada será labrada, en lugar de haber permanecido asolada a ojos de todos los que pasaron. 35 Y dirán: Esta tierra que era asolada ha venido a ser como el huerto de Edén; y estas ciudades que eran desiertas y asoladas y arruinadas, están fortificadas y habitadas.
13. Desatamos en Colombia y en nuestras naciones, la manifestación de la gloria del Señor como fruto de la predicación de la Palabra de Dios. Perdonamos a quienes han atentado contra la vida de los hijos de Dios, teniendo la certeza que el sacrificio de ningún mártir de la fe será en vano, sino que producirá avivamiento.
14. Proclamamos el cumplimiento de las promesas del Señor, que todo lo que ha sido atado y desatado en la tierra durante estos cuarenta días, también ha sido atado y desatado en los cielos y será hecho según nuestro acuerdo en oración;
Mateo 18:18-19 “De cierto os digo que todo lo que atéis en la tierra, será atado en el cielo; y todo lo que desatéis en la tierra, será desatado en el cielo. 19 Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos.”
Apocalipsis 21:6 “Y me dijo: Hecho está. Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. Al que tuviere sed, yo le daré gratuitamente de la fuente del agua de la vida.”
Mateo 28:18: Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
1 Juan 3:8: El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.
Daniel 4:17: La sentencia es por decreto de los vigilantes, y por dicho de los santos la resolución, para que conozcan los vivientes que el Altísimo gobierna el reino de los hombres, y que a quien él quiere lo da, y constituye sobre él al más bajo de los hombres.
Ef 1:20-23: La cual operó en Cristo, resucitándole de los muertos y sentándole a su diestra en los lugares celestiales, 21 sobre todo principado y autoridad y poder y señorío, y sobre todo nombre que se nombra, no solo en este siglo, sino también en el venidero; 22 y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia, 23 la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo.
El presente decreto rige a partir de la fecha de su expedición.
Publíquese, comuníquese y cúmplase por los ministros y ejércitos de Dios para la Gloria y Honra de nuestro Señor Jesucristo.
[1] Todas las referencias bíblicas son de la versión Reina Valera 1960 a menos que se indique una versión diferente.