Published using Google Docs
generacion del 14 textos
Updated automatically every 5 minutes

El novecentismo o la Generación del 14.

A. ¿De qué trata cada texto y a qué género crees que pertenece?

B. Di de qué tipo de texto se trata en cada caso: argumentativo, narrativo, descriptivo, expositivo, poético, dialogado...

C. Une cada uno con el que creas que podría ser su autor y justifica tu elección (autores al final).

D. Señala algún recurso expresivo y explica su sentido.

E. Relaciona alguna/s de las siguientes características del grupo con los textos justificando tu elección:

- Reformismo burgués en lo político: deseo de reformar o modernizar el país.

- Búsqueda de un nuevo tipo de intelectual, con una sólida preparación universitaria.

- Reacción contra actitudes noventayochistas y  modernistas: pesimismo y esteticismo, respectivamente.

- Europeísmo, frente el casticismo (defensa de lo español) del 98.

- Elitismo: literatura para minorías: “A la inmensa minoría” JRJ

- Antirromanticismo. Fervor por lo clásico. Huida del sentimentalismo.

- Pulcritud, distanciamiento, equilibrio ("deshumanización del arte"). Intelectualismo. Búsqueda del "arte puro". “Älgebra de las metáforas”. Arte intelectual.

- Preocupación por el lenguaje (que es lo que más une entre sí a los novecentistas). Se huye de lo fácil, de la monotonía. Se busca la "obra bien hecha", la perfección formal a través de un estilo depurado pero no sencillo o coloquial como el de los del 98.

1. Texto expositivo-argumentativo. Género: ensayo. Ortega y Gasset, La deshumanización del arte: Aunque sea imposible un arte puro, no hay duda alguna de que cabe una tendencia a la purificación del arte. Esta tendencia llevará a una eliminación progresiva de los elementos humanos, demasiado humanos, que dominaban en la producción romántica y naturalista. Y en este proceso se llegará a un punto en que el contenido humano de la obra sea tan escaso que casi no se le vea; entonces tendremos un objeto que solo puede ser percibido por quien posea ese don peculiar de la sensibilidad artística. Sería un arte para artistas, y no para la masa de los hombres. He aquí por qué el arte nuevo divide al público en dos clases de individuos: los que lo entienden y los que no lo entienden; esto es, los artistas y los que no lo son. El arte nuevo es un arte artístico.

2.Texto expositivo-argumentativo. Género: discurso político. Manuel Azaña.  Diario de sesiones de las Cortes, 13 de octubre de 1931: La revolución política, es decir, la expulsión de la dinastía y la restauración de las libertades públicas, ha resuelto un problema específico de importancia capital, ¡quién lo duda!, pero no ha hecho más que plantear y enunciar aquellos otros problemas que han de transformar el Estado y la sociedad españoles hasta la raíz. Estos problemas, a mi corto entender, son principalmente tres: el problema de las autonomías locales, el problema social en su forma más urgente y aguda, que es la reforma de la propiedad, y este que llaman problema religioso, y que es en rigor lo implantación del laicismo del Estado con todas sus inevitables y rigurosas consecuencias. Ninguno de estos problemas los ha inventado la República (...). España ha dejado de ser católica; el problema político consiguiente es organizar el Estado en forma tal que quede adecuado a esta fase nueva e histórica el pueblo español. Yo no puedo admitir, señores diputados, que a esto se le llame problema religioso. El auténtico problema religioso no puede exceder de los límites de la conciencia personal, porque es en la conciencia personal donde se formula y se responde a la pregunta sobre el misterio de nuestro destino.

3.Texto narrativo-descriptivo. Género: novela. Gabriel Miró, Las cerezas del cementerio. Abrióse la mañana con la gracia y lozanía de una flor inmensa. El barco se había acercado a la costa, cándida de humos de nieblas y de hogares, y rubia del sol reciente y bueno Félix y sus amigas se contemplaron con más detenimiento que en la pasada noche, y sintiéronse íntimos, gozosos, comunicados de una gloriosa llama de alegría, de la beatitud de la hermosura del cielo y del mar.

Princesas de conseja le parecieron al estudiante las dos mujeres. Vestían de blanco, y bajo sus floridos sombreros de paja, color de miel, desbordaban las cabelleras, apretadas, doradas, ondulantes como los sembrados maduros. Félix era alto, pálido, y más rubio que ellas; llevaba una azulada boina, y por corbata un pañuelo de seda blanca, ceñido con graciosa lazada de artista o de niño.

Hablaron de ellos mismos, de sus casas. La señora miraba a Félix con curiosidad y enternecimiento. Le dijo su nombre; Beatriz, y el de su hija: Julia.

El de la madre dio a Félix sabor y perfume de mujer patricia y romántica. Parecíale llena de gracia y de misterio, y su palabra más dulce, cálida y sabrosa que los panales recién cortados. No le rindió la usada galantería de que la hubiese creído hermana de Julia, sino que las supuso lo que realmente eran, y que Naturaleza había dado que una maravillosa juventud crease otra melliza, como dos flores de un mismo rosal que, abriéndose en tarde distinta, tienen después la misma fragancia y hermosura.

4.Texto narrativo. Género: novela. Wenceslao Fernández Flórez. El bosque animado:  Por entre los robles y castaños, siguiendo las sinuosidades de una vereda casi cubierta por los tojos, vio avanzar un fantasma. Era un fantasma enteramente igual a cualquier otro fantasma aldeano. Venía envuelto en una blanca sábana,traía una luz sobre la cabeza y arrastraba unas cadenas que chirriaban al rozar con los pedruscos del camino. Xan de Malvís se había disfrazado demasiadas veces de espectro en sus aventuras amorosas para no comprender que aquella era auténticamente un alma en pena. Tan asustado quedó que ni habla tuvo para conjurar la aparición inesperada.Corrió hacia su cueva, arañándose en las zarzas, y no concilió el sueño hasta el amanecer.

Dos noches después casi tropezó con el mismo fantasma,junto a las rocas cubiertas de musgo que amparaban su guarida.

-¡Jesús, María, José!- exclamó entonces, santiguándose-. ¿Quién eres y qué quieres de mí?

Y el fantasma habló con la voz afligida, un poco en falsete, de todos los fantasmas:

-Soy el ánima de Fiz de Cotobelo, el de Cecebre, que anda penando por estos caminos.

-¿Quieres unas misas?-preguntó resueltamente Fendetestas, como si las llevase él en el bolsillo.

- Nunca vienen mal- parece que respondió el fantasma-. Pero si me ves así es porque hice en vida la promesa de ir a San Andrés de Teixido. Y no la cumplí, y ahora necesito que un cristiano vaya descalzo y peregrinando en mi lugar, y que una vela tan alta como yo he sido.

Xan de Malvís se rascó la cabeza donde, si algunos pelos se habían tranquilizado, otros seguían erizados aún. Balbució: -Pues…, yo bien iría…, pero, la verdad, no me conviene mucho ni creo que me dejasen llegar muy lejos.

El espectro lanzó un largo gemido que hizo que volviesen a poner de punta aquellos pelos ya sosegados de Malvís, y siguió arrastrando cadenas.

-Rezaré por ti- ofreció Fendetestas.

5. Texto poético. Gómez de la Serna. Género: Greguerías:

6.Texto poético. Juan Ramón Jiménez. Eternidades (1916-7): 

 ¡Intelijencia, dame

el nombre exacto de las cosas!

… Que mi palabra sea

la cosa misma

creada por mi alma nuevamente.

Que por mí vayan todos

los que no las conocen, a las cosas;

que por mí vayan todos

los que ya las olvidan, a las cosas;

Que por mí vayan todos

Los mismos que las aman, a las cosas…

¡Intelijencia, dame

el nombre exacto, y tuyo

y suyo, y mío, de las cosas!  (Enlace al comentario del poema)

Autores:

Manuel Azaña: Político español, presidente de la Segunda República. Procedente de una familia liberal, estudió Derecho doctorándose con una tesis sobre La responsabilidad de las multitudes; entró por oposición en la función pública. Como jefe de un gobierno formado por socialistas y republicanos de izquierdas (1931-33),impulsó un amplio programa de reformas: secularizó la vida pública (legalizando el matrimonio civil y el divorcio), reformó el ejército, puso en marcha una reforma agraria y concedió la autonomía a Cataluña. Todo ello le enfrentó con las fuerzas conservadoras, pero no fue suficiente para asegurarle el apoyo del movimiento obrero, en un momento en que la depresión económica mundial agudizaba las dificultades; desprestigiado por la represión armada de un levantamiento campesino en Casas Viejas (Cádiz), hubo de dimitir y perdió las elecciones de 1933, que dieron el gobierno a la derecha.

José Ortega y Gasset: Tras licenciarse en Filosofía, amplía estudios en Alemania. En 1910 obtiene la cátedra de Metafísica en la Universidad de Madrid. En 1913 funda la “Liga para la Educación Política”; en 1915 la revista España y, en 1923, la Revista de Occidente, en la que hallarán cabida las nuevas corrientes europeas y españolas de todos los campos del pensamiento y de la creación. Durante toda su vida desarrolló una intensa actividad como escritor y conferenciante. Apoyó a la República pero luego se sintió decepcionado. Al principio de la guerra civil se exilió; regresó en 1945 pero se le negó el reingreso en su cátedra. Ortega continuaría su labor magistral en el Instituto de Humanidades fundado por él en Madrid. Murió en esta ciudad en 1956.

Juan Ramón Jiménez -Moguer (Huelva) en 1881- Vivió consagrado a su Obra: la creación poética. La muerte de su padre le produjo una profunda crisis que le duró varios años. Se instaló en Madrid y se casó con Zenobia Camprubí. Al estallar la Guerra Civil, se exiliaron a América. En 1956 recibió el Premio Nobel de literatura. Tres días más tarde muere Zenobia y dos años después muere él

Gabriel Miró-1879-1930- Alicante- marcado por su estancia en un colegio de jesuitas, que incrementó o desencadenó una tendencia misantrópica y triste. Sus estudios de Derecho no hicieron sino retrasar su producción literaria. Sus poseen la peculiaridad de haber sido escritas con un preciosismo formal que recuerda el modernismo por sus tendencias decadentistas más líricas. Una de sus novelas, Las cerezas del cementerio, es catalogada como novela lírica por su elaborada prosa.

Wenceslao Fernández Flórez: (A Coruña, 1879 - Madrid, 1964) cultivó en sus novelas, relatos y artículos periodísticos un humorismo cargado de crítica social. Sus primeras novelas se centran en la descripción de la vida provinciana gallega mediante un enfoque naturalista en el que no falta la nota melancólica. En los años de gobierno republicano y durante la guerra civil española, el autor se decantó por la sátira política de inspiración conservadora. Es autor de la novela El bosque animado, que narra la vida en un bosque gallego. Precursora del realismo-mágico.

Ramón Gómez de la Serna: Nació en Madrid, hijo de un jurista, y estudió Derecho, pero se sintió atraído por el periodismo. Siempre se manifestó como un iconoclasta con respecto a las artes y tendencias culturales y se mostró como un vanguardista. Creó un estilo conocido como el ramonismo, sinónimo de independencia, esteticismo y provocación. Autor prolífico de más de cien libros de todos los géneros como la novela, el ensayo, el cuento, el teatro o el artículo periodístico y de la greguería, que él definió como "metáfora más humor". Fue un nihilista que ante la sociedad caótica y carente de valores con la que le tocó vivir. Al estallar la Guerra Civil española marchó a Buenos Aires, de donde no regresó más.